Por Juan Tomás Valenzuela
Zapete, acudió a la cita
que tenía en Ciudad Nueva,
con la despreciable gleba
del procurador mamita.
Allí fue la prensa escrita,
tan solo a ver klk.
Si acaso tenía el tupé,
este ruín simulador,
de ir a defender su honor
y el de su hermana Maybeth.
Marino, enseñó papeles
de corrupción y de dolo,
donde Maybeth y Torombolo
(el delfín de Chacumbele)
se repartían por toneles
los dineros del Estado,
en un fraude de entalviado
de calles y callejones,
donde se fueron millones,
sin nadie haberse enterado.
El asunto es que Maybeth
(que a penas sabe escribir)
firmó con este faquír,
(que apenas sabe leer)
un contrato donde él
cede unas cubicaciones
por más de 11 mil millones,
según leí en Diario Libre,
sin que ella tenga el calibre
para estas negociaciones.
Pero a quien hoy han llevado
a sentarse en el banquillo,
no es a la zorra ni al pillo,
sino a quien dá el enunciado.
Pues se da por descontado
que pá ellos, la honestidad,
no tiene oportunidad
en su Estado delincuente,
ya que el mismo presidente
promueve la iniquidad.
Pero el pueblo ha despertado
y ahora si habrá consecuencias,
porque ya la presidencia
se encamina hacia otro lado.
Se embromán estos taimados
para el año 2020.
Ahí viene otro presidente
que va a acabar con el robo,
con unos jueces más probos
y un fiscal independiente.
Juan de los Palotes
12 diciembre 2019